PROPUESTA.- Los empresarios forestales plantean alianzas con todos los sectores que tienen concesiones forestales para evitar más avasallamientos e incendios a éstas áreas.

El gerente de la Cámara Nacional Forestal de Bolivia, Jorge Ávila, ha presentado una propuesta innovadora para abordar el persistente desafío del avasallamiento e incendios en los bosques productivos del país. En una entrevista exclusiva con El Mundo, Ávila compartió su visión de colaboración entre el sector forestal y las comunidades indígenas que habitan estas áreas.

«Proponemos desarrollo, proponemos trabajo, pero siempre en un marco de sustentabilidad ecológica», afirmó Ávila. Su propuesta busca armonizar los aspectos sociales, ambientales y económicos, reconociendo la urgencia de actuar ante la inminente temporada seca que históricamente ha desencadenado incendios forestales devastadores.

ALIANZAS PARA EVITAR DESTRUCCIÓN DEL BOSQUE

Ávila subrayó la necesidad de romper con los patrones pasados y adoptar medidas concretas para frenar la deforestación y los avasallamientos. «No podemos seguir haciendo lo mismo y esperar resultados diferentes», enfatizó. Su propuesta es clara: permitir que actores económicos, ya sean privados, comunitarios o mixtos, asuman la responsabilidad de gestionar de manera sostenible los bosques actualmente desatendidos.

«Estos productores se convertirán en una verdadera barrera de contención contra los procesos destructivos de la naturaleza», destacó Ávila. Su enfoque busca aprovechar la complementariedad entre las comunidades indígenas y el sector privado para establecer prácticas de manejo sostenible en estas áreas vulnerables.

La propuesta de Ávila no solo es ambiciosa, sino también viable y sin costos adicionales para el Estado. «Estamos brindando la oportunidad para que los actores económicos se conviertan en una barrera de contención contra el avance de la frontera ilegal y legal», explicó.

PALMA ACEITERA

En otro aspecto de la conversación, Ávila abordó el tema de las plantaciones de palma aceitera, reconociendo la importancia de evaluar cuidadosamente los impactos ambientales de tales proyectos. «El desarrollo debe estar acompañado de prácticas que no dañen el medio ambiente», subrayó.

La propuesta de Ávila representa un enfoque integral y proactivo para proteger los bosques de Bolivia. Con un llamado a la acción y a la colaboración entre diversos actores, ofrece un camino hacia un futuro sostenible para las generaciones venideras